lunes, 1 de diciembre de 2014

"Arrugas" Paco Roca


                                                                       Juan Diego Vaquero Rodrigo                      


     Arrugas es  una historia que trata sobre Emilio, un antiguo ejecutivo bancario cuya familia le ha ingresado en una residencia debido a su avanzada edad. Allí conoce a Miguel, un abuelo muy liberal que odia lo que piensa la gente de los ancianos y quiere ser joven.
En la residencia hay muchos personajes, cada cual más llamativo. Un día a Emilio le diagnosticaron alzheimer. Este, aterrado intenta evitarlo a toda costa, pero cada vez su memoria va menguando hasta no acordarse de nada y Miguel lo lleva a la sala de arriba, en la que están los que no pueden valerse por sí mismos. Este es el gran miedo al que Emilio se enfrentó desde que llegó a la residencia.

     En primer lugar, la historia me ha parecido muy conmovedora, a la vez que un poco triste. Ha sido genial la mezcla entre el humor  que realizan inconscientemente los ancianos y la tristeza que se encuentra en su interior. Aunque trate  sobre personas mayores, es literatura juvenil ya que al ser estilo tebeo es ligero y fácil de leer. Me parece que esta obra nos hace pensar en lo que de verdad implica la vejez y lo que pueden cambiar las cosas de un momento a otro.
     En segundo lugar, en cuanto a los personajes, cada uno de ellos es diferente; pero todos tienen una cosa en común, su simplicidad y simpatía. En el caso de Miguel me gustaría resaltar que el autor ha conseguido plasmar el concepto que tengo yo de la vejez. Este pasó de no tener a nadie a tener solo un amigo, pero al que cuidaba como si fuera de su familia. Respecto a Emilio creo que refleja la situación de muchos ancianos, el “querer y no poder” hacer las cosas. Los personajes secundarios son entrañables personas que quieren vivir en paz a pesar de sus dificultades.
     En tercer lugar, por lo que respecta al vocabulario, lo que más me ha chocado son las palabras malsonantes que se asemeja mucho al tipo de conversación juvenil. También me parece llamativo que con tan pocas palabras y tantas imágenes se puedan expresar sentimientos tan complejos. Respecto al humor, el vocabulario utilizado es fácil de entender. En otras palabras es un humor muy actual. Debo resaltar que es de los pocos libros para los que no he necesitado el diccionario y en definitiva me parece un libro muy fácil de leer y sobre todo muy rápido en parte gracias al vocabulario.
     Finalmente, y como valoración personal del libro en su totalidad me parece un libro de diez, es un ejemplo de que, a veces, dice más la brevedad bien explicada que alargarse y no decir nada. Se lo recomendaré a mi familia para que puedan admirar este gran trabajo que es sin duda el tipo de libros que me gusta leer. Te hace pensar y reír, con un sentimiento de melancolía que te pone en la piel de personas que lo pasan mal y te ayuda a comprenderlas mejor.