Andrea Rapado Gallego
¿Te has
preguntado alguna vez que quedará de ti cuando ya no estés? Clara, una joven
adolescente y protagonista de este libro, sí. Justo cuando está al borde de la
piscina. Y tiene dos opciones: tirarse de cabeza cuando todo su cuerpo grita
para que lo haga, o quedarse quieta tapándose las orejas con las manos. Lo que
cuesta es decir adiós a las personas que importan, como Unai, un amigo de
Clara, que se inventa versiones de la muerte de su padre; o el abuelo, que
todavía conserva las croquetas que la abuela dejó antes de morir. Después de
ser expulsada del colegio, Clara descubre la similitud y el cariño que existe
entre su abuelo y ella, y deciden dar un paso al frente, no tan solo al
finalizar el cuadro que su abuela dejó a medias antes de morir, sino también al
organizar una gran cena con champán a la altura de las últimas croquetas que la
abuela había dejado preparadas.
En primer
lugar, el libro al principio no me convencía, pero al ir avanzando me fue enganchando e intrigando
cada vez más. La historia ha sido entretenida, impresionante y breve. Esta
novela trata de temas importantes como la familia, la amistad y lo que pueden
cambiar las cosas de un momento a otro. La historia está distribuida en
capítulos muy cortos, que hacen que la lectura sea amena, pero cohesionados de
forma inteligente y haciendo que el libro sea emocionante y adecuado. En cuanto
a su estructura, el libro se adapta al planteamiento, nudo y desenlace,
haciéndolo coherente y entretenido.
En segundo
lugar, en cuanto a los personajes, cada uno de ellos es muy diferente y
aparecen perfectamente descritos.
Clara, la
protagonista, es una joven adolescente e hija de padres divorciados. Es muy
romántica, creativa y muy celosa. Sabe defender lo que tiene y disfruta de todo
momento, aunque no sea como ella esperaba.
El abuelo de
Clara, en mi opinión, es un personaje fundamental del libro y un gran apoyo para
Clara.
La madre, de
profesión científica, es una mujer que no se entera de nada en lo relacionado
con su hija, pero cuando se entera de lo que ocurre, suele ser comprensiva.
Unai, es el
mejor amigo de Clara, y siente soledad por la pérdida de su padre tras un
accidente, Todo el mundo lo critica, pero Clara se da cuenta de que es una
buena persona y decide quedarse junto a él.
Lucas es el
chico del que todas las chicas están enamoradas por su "desarmante" sonrisa.
Pinilla y Zaera
(María y Jorge), amigos de Clara y una gran ayuda porque le dan sus consejos y
lo que María llama, "Mariteorías".
En tercer
lugar, el léxico y el vocabulario que usa la escritora es adecuado y sencillo.
Me gusta como describe las situaciones y como utiliza los adjetivos en
abundancia para explicarlos.
Finalmente, el
estilo de libro me ha encantado y además al estar narrado en primera persona,
me ha resultado fácil de comprender.