viernes, 10 de mayo de 2013

LOS DOS CABALLOS (Basado en " El jardinero" de Rabindranath Tagore)


                                                                               Virginia Álvarez Sánchez

El caballo manso vivía en un cercado, y el caballo salvaje vivía en la montaña. Mas su destino era encontrarse y había llegado la hora. El caballo salvaje relinchaba: “Amor, trotemos a la montaña”. El caballo preso decía bajito: “Ven tú aquí; vivamos los dos en la cerca”. Decía el caballo libre:”Entre vallas no puedo trotar”. “¡Ay!”, decía el caballo preso. “¿Sabré yo trotar entre tanto obstáculo?”.
El caballo libre relinchaba: ”Amor mío, relincha canciones del campo”. El caballo preso decía:”Estate a mi lado, te enseñaré la canción de los humanos”. El caballo libre cantaba;”No, no, no; nadie puede enseñar las canciones”. El caballo preso decía: “¡Ay! Yo no sé las canciones del campo”.
            Su amor es un anhelo infinito, mas no pueden volar crin con crin. Se miran y se miran a través de las maderas del cerco, pero es en vano el deseo. Y trotan nostálgicos y relinchan: “Acércate más, acércate más”. El caballo libre grita: “No puedo. ¡Qué miedo tu cerco cercado!” El caballo preso relincha bajito: “¡Ay! No puedo mis patas se han roto!”