Sol Villar Velasco
El 1 de octubre 1910 se inauguró la
Residencia de Estudiantes en las afueras de Madrid. Fue creada por la Junta
para Ampliación de Estudios e Investigaciones Científicas (JAE) e inspirada por
la Institución Libre de Enseñanza (ILE) cuyo objetivo era fomentar una
educación integral frente a la mera instrucción y defender la igualdad social y
de sexos.
Estaba dirigida por Alberto Jiménez
Fraud, nacido en Málaga en 1883, quien estudió derecho en la Universidad de
Granada y cursó el doctorado en Madrid.
Tanto la Residencia como la Junta
para Ampliación de Estudios formaban parte del proyecto de modernización
impulsado por la ILE siendo el cometido de la JAE el impulsar el intercambio
científico con los países más avanzados becando a jóvenes graduados de todo el
mundo, llegando a conceder hasta 3500 ayudas entre 1097 y 1939.
Entre 1910 y 1939 la Residencia fue
uno de los principales núcleos de modernización científica y educativa de
España.
Es la casa en la que vivieron y se
hicieron amigos Dalí, Lorca y Buñuel y también el lugar en el cual expusieron
sus teorías Einstein, Curie o Le Corbusier.
La igualdad de sexos que defendía la
ILE se materializa con la creación de la Residencia de Señoritas. Dirigida por
María de Maeztu, fue creada en 1915 para fomentar el acceso de las mujeres a
estudios superiores. Participaron en ella mujeres como Gabriela Mistral,
Victoria Ocampo o Clara Campoamor.
En 1988 la Residencia de Estudiantes
convocó con la colaboración del Consejo Superior de Investigaciones
Científicas, las primeras becas de estancia para estudiantes de tercer ciclo,
creadores y artistas.
La Residencia ya tiene más de 100
años, y la que fue y sigue siendo la casa de grandes científicos y artistas
continúa dedicada a la creación. Conservando su tradición innovadora, se
escucha lo más nuevo en música, en poesía y al mismo tiempo las nuevas voces
del porvenir de la cultura.