Adela Fuertes Rodrigo
El libro trata sobre un guardavía que se dedica a controlar, solitario,
un túnel por el que pasa el tren. Un día un viajero se le acerca, y comienzan a
hablar. El guardavía se encuentra incómodo y le cuenta a su compañero que en
ocasiones ve una figura que le hace señales y sirve de presagio para indicar
que algo malo va a ocurrir y que ese mismo día observó la sombra. Al día
siguiente, el compañero vuelve pero se encuentra el cadáver del guardavía que
fue atropellado por el tren, cuyo conductor hacía los mismos gestos que la
figura misteriosa.
En la historia se pueden distinguir las tres partes de una narración:
inicio, que es un poco confuso; nudo, en el que todo cobra sentido y las ideas
se organizan; y desenlace, que para mí ha sido totalmente inesperado y la
historia se ha definido más dentro del terror.
Por otro lado, se podría decir que es una historia corta, y por lo tanto
tiene pocos personajes.
El guardavía es una persona fría e insegura, esto puede ser dado por los
años de soledad y sus paranoias.
El viajero intenta ayudarle en lo que puede y se muestra como una persona
muy paciente.
Es un libro bastante complejo de leer por la forma en que está escrito.
El principio es lo más difícil, yo creo que es porque no explica nada y entra
directamente en la trama. A lo largo de la narración ya todo va teniendo
sentido hasta que la idea general, que en otros libros suele aparecer al
principio, se completa. Respecto al vocabulario no es excesivamente complicado.
Sí que hay un par de palabras que no conocía, pero, en general, no es lo que
hace a esta historia compleja.
Resumiendo, el libro me ha gustado mucho. Es un tipo de terror que me
gusta porque es ligeramente psicológico y, a pesar de que hay un par de
muertes, no parece para nada sangriento. También me ha gustado que fuera un
relato breve, porque si fuera más largo, al ser difícil de leer quizá se
hiciera un poco pesado, pero en este caso te mantiene enganchado hasta el
final.
Personalmente, es un libro que quizá dentro de unos años me gustaría
redescubrir y volver a disfrutar leyéndolo.